Empezaba 2019 y vi en Instagram muchos vídeos de bailarinas con la misma canción. Investigué el hashtag que todas escribían (#BellyVoiceChallenge) y llegué hasta el perfil de Chronis Taxidis.
Chronis es un percusionista que tiene varios discos en el mercado. Me gusta porque suena diferente, y sus canciones parece que cuentan una historia.
Acababa de estrenar su nuevo álbum Underworld y para promocionarlo había creado un concurso en Instagram. Preparó una versión de 59 segundos de la canción principal del disco y para participar había que crear una coreografía, grabarla y subirla a Instagram con el hashtag #BellyVoiceChallenge.
Se supone que para principio de marzo decidiría quien ganaba, así que cogí el calendario e hice mis cálculos.
Tenía claro que quería estar entre los primeros puestos, pero no iba a ser fácil. Cientos de vídeos inundaban Instagram con bailarinas de todos los rincones. Tendría que crear algo diferente, creativo y muy especial para llamar la atención entre tantas participantes.
Resumen
La idea
Decidí dos cosas:
– Que este vídeo lo quería hacer con mis bailarinas de la Compañía, siempre en grupo se tiene más fuerza.
– Que quería grabar un vídeo en condiciones, representando la idea del álbum lo mejor que pudiera.
Si me sigues hace tiempo, sabrás que desde 2011 he grabado unos 10 videoclips de danza oriental. En ocasiones con mis bailarinas de la Compañía, en ocasiones con las alumnas de mi Escuela. Y para optar a un buen puesto, tenía que esforzarme.
Lo primero que hice fue estudiar bien la canción y el disco. En la portada pone Underworld – Take the key and follow me, que significa: Inframundo – Coge la llave y sígueme.
Mira la portada y sigo con la historia…
Investigué un poco más y en la descripción él hablaba de una Fairy of darkness, un hada de la oscuridad.
Ya tenía ingredientes suficientes.
Necesitaba:
– Un inframundo.
– Una llave.
– Un hada de la oscuridad.
Yo que soy optimista, creativa y que me pongo manos a la obra rápidamente, lo vi sencillo.
Mi madre, que es una genia del atrezzo, me sacó entre sus cajas secretas una llave preciosa muy antigua y yo ya visualizaba mi traje para representar a la Fairy of darkness.
La ubicación
La ubicación era lo que más me preocupaba. Hacía falta un sitio oscuro, subterráneo y que tuviera una escalera por la que bajar.
Lo hablé con mis bailarinas para ver si tenían alguna idea y Saray me propuso el sitio perfecto. Una antigua bodega abandonada en su pueblo, en la Ribera de Navarra. Tenía una escalera que encajaba perfectamente con la historia.
Lo primero, era ver el sitio con el cámara. Yo tengo la visión de cómo queda la coreografía con los trajes en la ubicación y él hace las pruebas para ver los planos que podríamos sacar.
Me costó un buen rato convencerle. Había una cantidad de polvo en el suelo que no te puedes hacer una idea. No solo era polvo, había mezcla de yeso o algo así que se había desparramado por todo.
Una capa de varios centímetros. Estaba claro que no se podía bailar así, había que quitarlo de alguna manera.
Quedé otro día con varias de mis bailarinas y mi familia para intentar arreglarlo. Nos presentamos bien temprano con un montón de escobas, pero imagínate.
Un sitio subterráneo, pequeño, sin ventilación… al empezar a barrer se levantaba una nube que no veíamos tres en un burro.
A toser a la calle. A reírnos del pelo blanco que se nos había puesto.
Mi hermana decía que no íbamos a poder arreglarlo, que hacía falta pensar otra cosa.
Plan B. Saray, que tenía casa en ese pueblo, bajó unas aspiradoras.
Mira, según lo escribo me salta la risa acordándome.
Aquí estoy con la aspiradora en mano. Fíjate que para tapar los focos habíamos puesto unos tableros de madera que no quedaban muy bien y que más tarde los cambiamos.
Aspirar era con mucho, mejor que barrer. Pero el ambiente seguía cargadito. Un descanso para comer y replantearnos las cosas.
Plan C. A mi hermana se le ocurre mojar el suelo.
Cogimos unos cubos viejos que había por ahí y nos liamos a formar un mortero en el suelo. Una pasta bien densita.
Pero funcionó, porque ya no subía polvo al aire, se quedaba ahí atrapado. Lo recogimos, aspiramos y barrimos y el suelo estaba listo para bailar.
Además, quedaban unos días hasta la fecha del rodaje, así que ya estaría el aire puro como en lo alto de un monte.
La coreografía
La canción es un solo de percusión de 59 segundos, así que la coreografía era fácil de hacer.
La preparé dejando una entrada para dar sentido al vídeo.
Un primer plano de la llave antigua, y yo, que era el hada de la oscuridad, bajando por la escalera.
¿Ves la llave?
Luego ya, a bailar. La coreografía está dividida en varias escenas, con distintos planos. Sobre todo, buscando movimientos con efecto óptico.
El vestuario
El traje que más me gusta para un solo de percusión es de flecos, que tenga movimiento. Como en la Compañía tenemos de varios colores, organicé las posiciones de forma simétrica con 4 colores.
Yo, el hada de la oscuridad, tenía que ir de negro. Me fabriqué un traje de plumas negro con mangas de encaje.
El rodaje
Faltaba ambientar el espacio. Primero, una regadita extra al suelo para que al bailar no se levantara polvo.
Hacía falta unas luces tenues, que pareciera tenebroso. Unos focos al lado de las cámaras iluminándonos y otros en el suelo en la pared del fondo para crear profundidad.
Siempre aparece todo lo que necesito. La vida apoya todas mis locuras. En la misma bodega había unos ladrillos abandonados de vete a saber cuándo, que funcionaron de maravilla para tapar los focos.
Unas velitas para decorar un poco más y todo listo.
Fue un rodaje bastante rápido. Estar en el mismo sitio y tener una coreografía cortita facilitan mucho el trabajo.
Hicimos una parte por la mañana, paramos a comer en la sociedad unos bocadillos y por la tarde terminamos.
Si te preguntas si tragamos polvo, la respuesta es sí. Pero mereció la pena.
Recuerdo más el polvo que el frío que chupamos. Era principio de febrero cuando rodamos, así que imagina la temperatura en una bodega de piedra abandonada hace décadas.
Te dejo unas fotos durante el rodaje:
Y una foto con Fidel, el cámara, al terminar:
Edición y post producción
Si has leído otros episodios de Diario de una bailarina, sabrás que me encanta la edición de vídeo y que yo me encargo de hacer todo el montaje. Fidel, el cámara, y mi marido, que también nos graba me pasan las tarjetas con los vídeos y yo me las veo durante días para elegir la mejor escena de cada parte.
Después, el toque mágico que ambienta todo, los efectos especiales de post producción. De esto se encargan mi hermana y mi cuñado, que son unos auténticos cracks.
Cuando empieza el vídeo y bajo la escalera, en la piedra de la pared aparece grabado el título de la canción, Underworld. Eso, no estaba en la bodega, es la magia de los efectos especiales.
Ya solo hacía falta publicarlo en Instagram con el hashtag y esperar.
Las ganadoras
Llegó la fecha de dar los nombres de las ganadoras y nada. Lo único que dijo es que había muchísimos vídeos y que se tomaba más tiempo.
Así, dos veces.
A la tercera que anunció fecha sí que cumplió. Hizo un directo con Ebru Bekker, una bailarina que le ayudaba con el proceso de selección para anunciar el veredicto.
Yo estaba muy nerviosa. Me había esforzado mucho en crear un videoclip bien coherente con la canción. La coreografía estaba muy bien montada y la combinación de trajes quedaba espectacular.
Ya había hablado con Chronis por privado cuando subí el vídeo. Me escribió rápidamente para decirme que le había encantado y que se había emocionado viendo el vídeo. Habíamos representado perfectamente la esencia y la idea de su disco.
Me dio a entender que estaría en los primeros puestos, pero había pasado ya mucho desde que subí mi vídeo y al ir posponiendo la fecha final, otras podrían haber cogido mi idea y haber hecho algo similar.
El directo no acababa nunca… hablaban de los cientos de vídeos que había de bailarinas de todo el mundo, de que habían estado desbordado mirando todos, etc. Y les costó lo que me pareció una eternidad decir los nombres de las ganadoras.
Y sí, Primer Premio para mi vídeo.
El vídeo
Lo que me falta de enseñarte es cómo quedó el videoclip ganador. Fíjate en la llave, el título de la canción grabado en la pared de la escalera, los focos tapados con ladrillos y el suelo casi impecable.
¿Quieres que te enseñe cómo crear coreografías ganadoras?
En mi curso Laboratorio Coreográfico aprenderás mi Método de 6 pasos para crear coreografías que encajen con la música como un guante.
Son 160 lecciones de teoría, práctica y ejemplos para que te conviertas en una experta y sepas sacar partido a la música árabe.
Solo abro plazas para nuevas alumnas durante unos días al año. Está disponible hasta el viernes 8 de marzo.
Cuéntame bailarina, te leo. ¿Qué te ha parecido este vídeo y esta aventura?
