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Patricia Beltrán

Profesora de danza

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Dioses egipcios – Seth, dios del caos y la tormenta

Introducción

Si has leído los artículos sobre Seth, Isis y Horus, ya sabrás que Seth no es precisamente el dios de la bondad y la comprensión.

De hecho, es uno de los dioses más complejos y controvertidos. Representa la guerra, el caos, la fuerza bruta y la tormenta.

Ha sido demonizado por sus actos, pero también debemos entender que su función dentro de la mitología egipcia es esencial para mantener el equilibrio entre el orden y el caos.

No solo es un dios destructor, sino que también simboliza la fuerza necesaria dentro del ciclo de la existencia.

Origen y genealogía

Geb, dios de la Tierra, y Nut, diosa del cielo, tuvieron varios hijos: Osiris, Isis, Neftis y Seth, que tuvo un nacimiento muy violento, presagiando su naturaleza caótica.

Su esposa principal fue su hermana Neftis, pero hay versiones en las que se le relaciona con otras diosas extranjeras, como Anat y Astarté.

Representación iconográfica

Es curioso que su representación sea tan rara y peculiar. Tiene forma humana con hocico curvado, orejas puntiagudas o rectangulares y cola.

Es decir, un animal no identificado o varios animales como el oso hormiguero, el galgo o el asno.

Esta representación de Seth ya nos da una pista de que fue un dios extraño para los egipcios desde los primeros tiempos.

Asesinato de Osiris

Este es uno de los mitos más conocidos de toda la mitología egipcia. Volvamos al momento del nacimiento.

Geb y Nut tuvieron 2 hijos varones: Osiris, el primogénito, que recibió el Valle del Nilo y Seth, que tuvo un nacimiento violento y desgarró el cuerpo de su madre al nacer, y recibió el desierto.

Osiris gobernaba de forma muy sabia, justa y equilibrada, por eso el pueblo lo amaba por ser un buen soberano. Enseñó agricultura, orden social y el arte de la civilización a su pueblo.

Seth estaba muy celoso de su hermano, ya que él no gozaba de tan buena fama y decidió matarlo para arrebatarle la corona de Egipto.

Le tendió una trampa durante un banquete con 72 invitados más. Mandó fabricar un precioso ataúd exactamente a la medida de Osiris. Planificó un juego en el que regalaría el ataúd a quien cupiera con la mayor exactitud.

Ya puedes imaginar lo que pasó, ¿verdad? Cuando Osiris se tumbó para probarlo cerraron la tapa y le pusieron plomo fundido para que pesara más. Lo llevaron al Nilo y lo tiraron al agua.

Isis, que era la esposa de Osiris trató de recuperar el cuerpo para devolverle la vida, ya que tenía poderes mágicos. Seth, que se enteró de su plan, robó el cuerpo, lo desmembró en 14 partes y las repartió por todo Egipto.

Isis, que era muy tenaz, con ayuda de su hermana Neftis recupera las 14 partes del cuerpo. Avisa a Anubis, el dios de la momificación para que le ayude en el ritual para resucitar a Osiris.

Le devuelven la vida, pero en el inframundo, por eso Osiris es dios de los muertos. En ese breve lapso que recobra la vida, Isis es fecundada de su hijo Horus.

Enfrentamiento con Horus

Es obvio que Horus quiere recuperar el trono que su tío Seth arrebató a su padre, así que sus enfrentamientos son épicos.

El enfrentamiento dura muchos años y tuvieron luchas tanto físicas como de ingenio, y pruebas impuestas por los demás dioses.

Finalmente, Horus es declarado vencedor y Seth se queda gobernando el desierto y algunas tierras extranjeras.

Seth como protector de Ra

No todo con Seth es negativo, también tiene un papel crucial en la protección del universo.

Ra, que es el dios del sol, recorre durante el día el cielo en su barca solar y durante la noche, transita el inframundo. Cada noche, libraba una batalla en el inframundo contra una serpiente demoníaca llamada Apofis, la encarnación del caos absoluto.

Pues bien, Seth es el encargado de defender la barca solar contra Apofis. Su fuerza y ferocidad son necesarias para mantener el equilibrio y evitar que la oscuridad devorara al sol.

Su culto y adoración

Seth gozó de un importante culto a pesar de su reputación y de sus actos, sobre todo en Ombos y Avaris.

Durante el Período Ramésida incluso algunos faraones se identificaron con él, para aparentar más poder y dominio sobre sus enemigos.

En la época tardía sí que fue más demonizado y su imagen se volvió más negativa.

Conclusión

Seth es un dios de mucho contraste, ya que representa la destrucción y la protección.

Lo que representa dentro de la mitología egipcia es la necesidad de equilibrio entre el orden y el caos, el bien y el mal. Nos muestra que, incluso las fuerzas más oscuras tienen su papel fundamental en el universo.

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