
Resumen
- Introducción
- Orígenes y evolución de Bastet
- Iconografía de Bastet
- Bastet como diosa de la protección y el hogar
- Bastet y los gatos: Animales sagrados en Egipto
- Bastet como diosa de la alegría y la música
- Bastet y su relación con otras deidades
- Templos y festivales dedicados a Bastet
- Bastet en la historia y su legado
- Conclusión
Introducción
Aunque haya deidades que te cueste visualizar, seguro que a Bastet la reconoces fácilmente.
Con forma de gata, es una de las diosas más populares y queridas. Se le asocia con la feminidad, la fertilidad, la música y la protección.
Era adorada por ser protectora del hogar, la familia y los gatos. Los gatos en Egipto eran sagrados, así que fue una de las diosas más veneradas.
Orígenes y evolución de Bastet
Bastet es una deidad muy antigua y, en sus primeras representaciones, aparecía como una diosa leona, similar a Sekhmet, con quien comparte muchas características. Se la consideraba una deidad solar, hija del dios Ra, y su papel era el de una protectora feroz.
Sin embargo, con el paso del tiempo, su imagen se suavizó y pasó a ser representada como una gata doméstica o una mujer con cabeza de gato. Este cambio reflejaba su papel más pacífico como protectora del hogar, símbolo de la feminidad y la maternidad.
Se cree que esta transformación ocurrió para diferenciarla de Sekhmet, quien mantuvo su faceta destructiva, mientras que Bastet se convirtió en una deidad más amorosa y festiva.
Iconografía de Bastet
Las representaciones de Bastet varían según la época, pero las más comunes son:
- Gata doméstica sentada, a menudo con un pendiente o collar, símbolo de nobleza y protección.
- Mujer con cabeza de gato, sosteniendo un sistro (instrumento musical) y un anj (símbolo de la vida).
- Gata amamantando a sus crías, representando la fertilidad y la maternidad.
Los egipcios creían que los gatos eran encarnaciones de Bastet y que al tener uno en casa, estaban bajo su protección.
Bastet como diosa de la protección y el hogar
Bastet era la guardiana del hogar y la familia. Se creía que protegía a los egipcios de enfermedades, espíritus malignos, plagas que podían arruinar las cosechas, malos augurios e influencias negativas.
Las mujeres embarazadas la veneraban para asegurar partos seguros y protección para sus hijos. También se invocaba a Bastet para atraer felicidad, amor y bienestar.
Bastet y los gatos: Animales sagrados en Egipto
Los gatos en el Antiguo Egipto eran sagrados porque se pensaba que eran manifestaciones de Bastet. Se les veneraba porque mantenían alejadas a las ratas y serpientes, protegiendo las casas y los graneros.
Matar un gato, incluso accidentalmente, era un crimen castigado con la muerte.
Cuando un gato moría, sus dueños guardaban luto y a menudo lo momificaban, enterrándolo en templos dedicados a Bastet. Se han encontrado miles de momias de gatos en Bubastis, lo que demuestra la gran importancia de este animal en la cultura egipcia.
Bastet como diosa de la alegría y la música
Bastet no solo protegía el hogar, sino que también era una diosa de la alegría, la danza y la música.
- En su honor se celebraban grandes festivales llenos de música, canto, vino y baile.
- Se asociaba con el sistro, un instrumento musical que se usaba en rituales para honrarla.
- Se creía que fomentaba la fertilidad y la sensualidad, por lo que también se la relacionaba con el amor.
En los festivales de Bastet, los egipcios se entregaban a la diversión, la bebida y las celebraciones desenfrenadas, algo inusual en una sociedad tan estructurada.
Bastet y su relación con otras deidades
Bastet era una diosa compleja con conexiones con varias divinidades egipcias:
- Sekhmet: En sus orígenes, Bastet era una diosa leona similar a Sekhmet, pero con el tiempo se convirtió en su contraparte pacífica.
- Ra: Era considerada hija del dios solar Ra y, en algunos mitos, lo acompañaba como su protectora.
- Hathor: Ambas eran diosas de la alegría, la música y la fertilidad, aunque Bastet estaba más enfocada en la protección doméstica.
Templos y festivales dedicados a Bastet
El templo principal de Bastet estaba en la ciudad de Bubastis, en el Delta del Nilo. Allí se celebraban festivales en su honor que eran de los más concurridos de Egipto.
Los Festivales de Bastet eran famosos por su gran cantidad de asistentes. Según el historiador griego Heródoto, miles de personas llegaban en barcas, tocando instrumentos, bailando y bebiendo vino. Se realizaban procesiones con estatuas de la diosa y la fiesta podía durar días.
En estos festivales, los fieles ofrecían estatuillas y momias de gatos a la diosa, esperando recibir su protección y bendiciones.
Bastet en la historia y su legado
El culto a Bastet sobrevivió durante siglos y continuó hasta la época grecorromana. Su imagen se fusionó con diosas extranjeras como Artemisa y Diana, quienes también representaban la protección y la caza.
Incluso hoy en día, Bastet sigue siendo una de las diosas egipcias más populares. Su asociación con los gatos la ha convertido en un símbolo moderno de la independencia, la protección y la feminidad.
Conclusión
Bastet es una de las diosas más queridas del Antiguo Egipto. Su evolución de diosa leona a protectora del hogar refleja cómo la sociedad egipcia valoraba la protección y la armonía en la vida cotidiana.
Como guardiana del hogar, diosa de la música y protectora de los gatos, Bastet sigue siendo una figura fascinante y un símbolo de la alegría, la seguridad y la energía femenina.